domingo, 11 de febrero de 2024

El poder del Espíritu Santo y la Oración intercesora

Se cuenta la historia de una mujer que pasó meses ahorrando para comprar una nueva refrigeradora. Estuvo extremadamente chasqueada cuando descubrió que la refrigeradora no trabajaba. Se echó a perder la leche, la fruta se pudrió y los vegetales perdieron su frescura. Aunque ésta era la primera refrigeradora propia que alguna vez había tenido, sabía que algo andaba terriblemente mal. ¿Cómo podía invertir tanto en un producto que tenía defectos tan serios?

La pobre mujer llamó a la compañía donde había comprado la refrigeradora para presentar su queja. La compañía mandó un mecánico de aparatos domésticos a su casa. Él estuvo asombrado cuando descubrió que la refrigeradora no estaba enchufada correctamente. El enchufe estaba suelto. Simplemente no había energía eléctrica. Necesitaba ser conectada a una fuente de electricidad.

Hay muchos cristianos con una "conexión suelta". Si van a ser ganadores de almas eficaces, necesitan ser conectados a la fuente de toda fuerza y poder. Lo que necesitan es poder: el poder del Espíritu Santo.

Elena de White revela un reavivamiento del poder del Espíritu Santo es nuestra necesidad más grande.

"La mayor y más urgente de todas nuestras necesidades es la de un reavivamiento de la verdadera piedad en nuestro medio. Procurarlo debiera ser nuestra primera obra. Debe haber esfuerzos fervientes para obtener las bendiciones del Señor, no porque Dios no esté dispuesto a conferirnos sus bendiciones, sino porque no estamos preparados para recibirlas. Nuestro Padre celestial está más dispuesto a dar su Espíritu Santo a los que se lo piden que los padres terrenales a dar buenas dádivas a sus hijos. Sin embargo, mediante la confesión, la humillación, el arrepentimiento y la oración ferviente nos corresponde cumplir con las condiciones en virtud de las cuales ha prometido Dios concedernos su bendición". 1MS, 141.

Es imposible ser un testigo exitoso para Dios si el poder del Espíritu Santo no fluye a nuestras vidas. En esta lección descubriremos cómo recibir el poder del Espíritu Santo para llegar a ser ganadores de almas eficaces. También aprenderemos el arte de la oración intercesora que cambia vidas. Comencemos.

1. RECIBIENDO EL ESPÍRITU

La Biblia traza algunos pasos prácticos que nosotros podemos tornar para preparar nuestros corazones para recibir el Espíritu Santo. Los podemos llamar el ABC de cómo recibir el Espíritu Santo.

1. ¿Cuál es la primera condición para recibir el don del Espíritu Santo?


"Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿Cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?" Lucas 11:13


Dios nos invita a "pedir el Espíritu". La razón porqué debemos pedir no es porque Dios es reacio en darnos su Espíritu, pero porque nosotros no estamos preparados para recibirlo. Cuando pedimos, esto prepara nuestros corazones para recibir. Pedir es el primer paso en el proceso de recepción.

2. Después que le pedimos el Espíritu Santo a Dios, ¿cuál es el siguiente paso esencial? 


"Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá." Marcos 11:24


Creer es tener fe que Dios cumplirá sus promesas cuando nosotros satisfacemos las condiciones. Creer es confiar que Dios hará exactamente lo que él dice que hará. Las primeras dos condiciones para recibir el Espíritu Santo son pedir a Dios que nos dé su don y creer que él cumplirá con su palabra.

"Pedid, creed y recibid. Es demasiado frecuente que nos burlemos del Señor; hay demasiadas oraciones que no son oraciones y que cansan a los ángeles y desagradan a Dios, demasiadas peticiones vanas y sin sentido. Primero debemos sentirnos menesterosos, y luego pedir a Dios aquellas cosas que necesitamos, creyendo que él nos las da, aun mientras se las pedimos; y luego nuestra fe crecerá, todos serán edificados, los débiles serán fortalecidos, y los desalentados y abatidos inducidos a levantar la cabeza y creer que Dios es galardonador de aquellos que le buscan diligentemente". PE, 115.

3. ¿Cuál es el tercer paso en recibir el don del Espíritu Santo? 

"Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio". Hechos 3:19.

El arrepentimiento es un aspecto de la confesión. En la confesión verdadera, descubrimos nuestros corazones ante Dios, reconociendo nuestros pecados y expresando una pena sincera por ellos. El arrepentimiento tiene que ver con un cambio de mente o corazón. Esta pena del alma, esta tristeza, porque le hemos partido el corazón a Dios, abre nuestros propios corazones para que sean testigos eficaces. Antes del día de Pentecostés, los discípulos pidieron el Espíritu. Ellos creyeron en la promesa de Dios, la pidieron por fe y abrieron sus corazones para recibir el Espíritu a través de la confesión y el arrepentimiento genuino.

"En nuestro medio hay una gran necesidad de la influencia del Espíritu Santo. Debe haber una obra individual que quebrante los corazones obstinados. Se necesita un profundo escudriñamiento del corazón que conducirá a la confesión de los pecados. Los creyentes debieran en esta hora tener sus corazones tiernos, santificados y quebrantados, habiendo confesado cada pecado con el arrepentimiento del que no hay que arrepentirse". RAJ, 94.

4. ¿Cuál será el resultado de tomar esos tres primeros pasos? 

"Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra." Hechos 1:8.

De la misma manera en que el Espíritu Santo fue derramado sobre los discípulos que oraban, creían y confesaban, el Espíritu Santo será derramado en nuestro día. Una vez más, el poder de Dios fluirá de su trono. Dios levantará una generación de testigos en los últimos días. Cuando se han satisfecho las condiciones, la promesa será cumplida.

Cuanto más conocemos a Cristo, más anhelamos compartir su amor con otros. Cuanto más compartimos su amor, más anhelamos conocerlo mejor. Cuanto más lo amamos, más testificaremos. Cuanto más testificamos, más lo amamos. La testificación a otras personas está conectada con nuestro propio crecimiento espiritual.

"Dios podría haber alcanzado su objeto de salvar a los pecadores, sin nuestra ayuda; pero a fin de que podamos desarrollar un carácter como el de Cristo, debemos participar en su obra. A fin de entrar en su gozo-el gozo de ver las almas redimidas por su sacrificio,-debemos participar de sus labores a favor de su redención". DTG, 116.

El derramamiento del Espíritu Santo ha sido prometido a aquellos que le están pidiendo a Dios que les dé el poder para testificar.

"El Espíritu Santo vendrá a todos los que imploran la recepción del pan de vida para darlo a sus vecinos." 6TI, 96.

2. EL ESPÍRITU SANTO, LA ORACIÓN INTERCESORA Y LA TESTIFICACIÓN

5. ¿ Cuáles son los dos ingredientes esenciales para la ganancia de almas?


"Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye. Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho. Si alguno viere a su hermano cometer pecado que no sea de muerte, pedirá, y Dios le dará vida; esto es para los que cometen pecado que no sea de muerte. Hay pecado de muerte, por el cual yo no digo que se pida." 1 Juan 5:14-16

Cuando le pedimos a Dios por otros en una intercesión ferviente, él promete hacernos un canal para su poder dador de la vida. El río del agua de vida del trono de Dios es derramado a través de nosotros para tocar otros corazones. Nuestras oraciones y nuestra fe hacen una diferencia dramática en sus vidas. Elena de White lo hace muy claro cuando ella habla de estos dos ingredientes esenciales.

"La oración y la fe harán lo que ningún poder en la tierra podrá hacer''. MC, 407.

"Forma parte del plan de Dios concedernos, es respuesta a la oración hecha con fe, lo que no nos daría si no se lo pidiésemos así". CS, 580.

En la literatura médica hay más de 130 investigaciones sobre la eficacia de la oración intercesora y la curación. Las personas por quienes se ha orado, sencillamente se sanan más rápidamente, tienen menos complicaciones, necesitan menos medicamentos y vuelven menos al hospital. En la esfera física, hay una diferencia dramática cuando se ora a favor de las personas. Si esto es cierto en la esfera física, entonces seguramente es cierto también en la esfera espiritual.

La ganancia de un alma no es como arreglar un automóvil o hacer un pastel, donde hay una cierta formula, y cualquiera que la sigue tendrá éxito. No; cada persona es diferente, y aunque hay principios básicos para la ganancia de almas que se aplican a cada situación, nosotros necesitamos la sabiduría de Dios para aplicarlos. De otro modo, las mentes no serán impresionadas. Las vidas quedarán sin cambiar.

No existe un substituto para las oraciones por las almas. Ninguna persona puede ser ganada a Cristo sin la oración. La conversión es un milagro. Los ganadores de almas no son sencillamente vendedores convincentes que están promoviendo un producto. Estamos hablando de lo más valioso en el mundo: las personas.

3. CUATRO RAZONES PARA LA ORACIÓN INTERCESORA

¿Porqué es necesario orar por las personas? 
¿Acaso Dios no sabe que ya las queremos ganar para su Reino?
¿No está haciendo Dios todo lo que puede sin que nosotros oremos?

Hay mucho acerca de la ciencia de la oración que la mente humana no pueda entender. Esto no nos debería desanimar. El hecho que no sabemos todo acerca de la electricidad no impide que empleemos los beneficios de la luz, el calor y al energía eléctrica.

Aun si nunca llegamos a entender completamente la ciencia de la oración, hay por lo menos cuatro razones porqué nosotros deberíamos orar por las almas.

1. La oración hace posible que Dios nos hable acerca de los pecados en nuestras propias vidas que son un obstáculo para la ganancia exitosa de almas.

6. ¿Qué pidió David en oración? 


"Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí. No me eches de delante de ti, y no quites de mí tu santo Espíritu. Vuélveme el gozo de tu salvación, y espíritu noble me sustente" Salmos 51:10-12.


David deseaba tener pureza de corazón. Anhelaba tener la presencia de Dios en su vida. Ansiaba tener la plenitud del Espíritu de Dios.

7. ¿Qué es lo que David dice que será el resultado de una experiencia renovada con Jesús? 


"Entonces enseñaré a los transgresores tus caminos, y los pecadores se convertirán a ti." Salmos 51:13


Una experiencia renovada con Dios nos conduce al deseo de compartir esa experiencia con otros. Como resultado de estar llenos del Espíritu de Dios, su amor fluye para fuera.

Antes que Dios pueda hacer algo con nosotros, él debe hacer algo por nosotros. Antes de que Dios pueda hacer algo a través de nosotros, él debe hacer algo en nosotros. El poder de Dios está limitado cuando hay pecados que nosotros abrigarnos en nuestros propios corazones. Frecuentemente, mientras que nosotros estamos orando por otros, Jesús impresiona a nuestros propios corazones con la necesidad de estar en comunión con él en forma más cercana.

2. La oración profundiza nuestro deseo por lo que nosotros estamos orando.

8. ¿Qué es lo que Jesús pidió en oración en el Getsemaní? 

"Yendo un poco adelante, se postró sobre su rostro, orando y diciendo: Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú." Mateo 26:39

Una de las oraciones intercesoras modelo en la Biblia es la oración que Jesús oró por nuestra salvación en el Getsemaní. Cuando el Salvador estaba orando. Él experimentó un conflicto con los poderes del infierno. Él clamó sobre sus rodillas: "Si es posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú".

Jesús ganó la batalla ahí en el jardín. Su deseo de salvarnos se intensificó mientras él oraba. Lo que él estaba pidiendo en oración, nuestra salvación, se convirtió en la pasión completamente consumidora en su vida. Seguramente él deseaba salvarnos antes de orar, pero después de su oración, su deseo de salvarnos fue aun más fuerte.

Cuanto más oramos por la salvación de alguien, más deseamos su salvación.
Cuanto más deseamos su salvación, más estaremos buscando oportunidades creativas para alcanzar a esa persona.

3. La oración nos pone en contacto con la sabiduría divina.

9. ¿Qué promete Santiago para los que necesitan sabiduría? 

"Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada." Santiago 1 :5


Dios es el único que es sabio en la medida suficiente como para ganar almas. Jesús revela las palabras que se deben decir a los hombres y las mujeres. Sin su sabiduría, nosotros podremos conocer los principios claves; pero no sabremos donde es que se deben usar. Solamente cuando Cristo nos otorgue sabiduría, sabremos cual es la clave correcta que abrirá los corazones para que reciban los tesoros del evangelio.

4. La oración hace posible que Dios obre más poderosamente de lo que podría hacer si nosotros no orásemos.

10. ¿Qué les promete Dios a los que lo buscan en la intercesión?

"Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho." Santiago 5:16 (última parte)

"Entonces me dijo: Daniel, no temas; porque desde el primer día que dispusiste tu corazón a entender y a humillarte en la presencia de tu Dios, fueron oídas tus palabras; y a causa de tus palabras yo he venido." Daniel 10:12 

Como lo declara el apóstol Santiago, "la oración eficaz" de una persona justa hace una diferencia dramática. Como lo anunció el ángel a Daniel, "fueron oídas tus palabras".

Cuando nosotros intercedemos por otros, la vida fluye del trono de Dios a traces de nosotros para tocar a otras vidas. Nos convertimos en el canal de bendición de Dios en el gran conflicto entre el bien y el mal.

Daniel 10 cuenta la historio de cómo las oraciones de Daniel ascendieron al cielo por tres semanas sin que aparentemente hubiese alguna respuesta. Sin embargo, al final de esas tres semanas Gabriel le explicó a Daniel que se había estado peleando una gran batalla por la mente de Ciro. Los ángeles buenos trataron de empujar hacia atrás a los ángeles malos, para que Ciro pudiese hacer la decisión correcta. Los ángeles malos trataron de destruir a los ángeles buenos, para envolver a Ciro en la oscuridad. Mientras Daniel oraba, esta batalla continuaba con pleno furor. Finalmente Jesús bajó, los despeñó a los ángeles malos, y le dio una oportunidad a Ciro de hacer una decisión clara e inteligente, una decisión que permitió que Israel tuviese libertad. La oración intercesora de Daniel demostró ser eficaz.

11. ¿Cuál modelo de intercesión nos da el apóstol Pablo? 

"Siempre orando por vosotros, damos gracias a Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo." Colosenses 1:3.

"Doy gracias a mi Dios siempre que me acuerdo de vosotros, siempre en todas mis oraciones rogando con gozo por todos vosotros." Filipenses 1:3-4.

El apóstol Pablo se acordaba de las iglesias que él había levantado durante sus viajes evangelísticos. Él oraba diariamente a favor de las iglesias en Galacia, Efeso, Filipos, Colosas y Tesalónica.

Pablo tenía su lista de oración. Él oraba por los individuos por nombre. Él oraba por iglesias y él oraba por ciudades específicas. ¿ Tiene usted una lista de oración? ¿Está orando por sus seres queridos por nombre? ¿Está elevando a su comunidad ante Dios?

La ganancia de almas exige el poder de Dios para hacer la obra de Dios.

12. Además de la oración a solas, ¿qué enseñanza nos dio Jesús acerca de la oración con otras personas? 


"Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos. Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos." Mateo 18:19-20


Los grupos de oración proveen la base para el evangelismo exitoso. La obra de conversión no es natural; es sobrenatural. Un vendedor podrá persuadir a una persona a que compre un nuevo automóvil. Las compañías de publicidad podrán convencer a un individuo a que compre un traje nuevo. Un agente de bienes raíces podrá hacer que una persona se interese en una casa nueva y atractiva. Estos vendedores pueden obtener resultados cuando siguen ciertos métodos. Pueden vender sus productos. Aun podría ser posible que un ministro cristiano pueda persuadir a una persona a que se una a la iglesia.

Pero sólo Dios puede efectuar la conversión genuina en el alma. El evangelismo exitoso debe incluir un ministerio de oración.

"¿Por qué no se reúnen dos o tres para interceder con Dios por la salvación de alguna persona en especial, y luego por otra aún?" 3JT, 84.

Tome un momento ahora mismo y escriba, en las líneas abajo, los nombres de las personas que usted piensa que podrán estar receptivas al evangelio. Puede ser que estas personas sean miembros de su familia, compañeros de trabajo, amistades, vecinos o conocidos que no ha tratado mucho.

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Pídale a Dios por estas personas cada día. Escriba sus nombres y suplique al cielo por sus almas. Si es posible, escoja un compañero de oración. Bombardeen juntos al cielo con sus oraciones. Dios contestará. Ustedes se convertirán en un canal para su abundante bendición.

La oración hace posible que nosotros seamos sensibles a la dirección del Espíritu Santo.
La oración nos permite ver con los ojos de Dios. Si nosotros vamos a alcanzar a la gente para Cristo, debemos entender cómo acercarnos a ellos de la mejor forma, cómo contestar sus preguntas, y cómo apelar a ellos de la mejor manera. Sólo Dios nos puede guiar a las personas que nosotros seremos más eficaces en alcanzar.

Para ser los testigos más eficaces para Dios, estamos buscando las personas que Dios ha preparado especialmente para que nosotros trabajemos con ellas. Aquí hay algunas cosas que debemos tener en mente.

• ¡Su tarea no es cada persona en el mundo!
• Ore para que Dios le guíe a la persona a quien él quiere que usted testifique.
• Mire primero a las personas que Dios trae a su vida cada día.
• Vele por oportunidades para compartir el amor de Dios y observe la respuesta de esas personas.

"Comenzad a orar por las almas; aproximaos a Cristo, colocaos más cerca de su costado sangrante. Permitid que un espíritu humilde y sereno adorne vuestras vidas, y haced que vuestras peticiones fervientes, sinceras y humildes asciendan hacia Dios en busca de sabiduría, para tener éxito en la salvación no sólo de vuestra propia alma, sino también de otras almas." 1 TI, 449.

Cuando pedimos, nosotros recibimos. La razón porqué no recibimos frecuentemente de Dios es porque no pedimos. Tendremos éxito en la ganancia de almas cuando empecemos a orar por las almas. Usted llegará a ser parte del cumplimiento de esta maravillosa declaración:

"Se advertía un espíritu de oración como lo hubo antes del gran día de Pentecostés. Veíase a centenares y miles de personas visitando las familias y explicándoles la Palabra de Dios. Los corazones eran convencidos por el poder del Espíritu Santo, y se manifestaba un espíritu de sincera conversión. En todas partes las puertas se abrían de par en par para la proclamación de la verdad. El mundo parecía iluminado por la influencia divina. Los verdaderos y sinceros hijos de Dios recibían grandes bendiciones. Oí las alabanzas y las acciones de gracias: parecía una reforma análoga a la del año 1844." CI, 117.

Ya que estamos viviendo en los días de la última cosecha en el mundo, es esencial que nos consagremos a Dios para servir. El éxito de cualquier obra de estudios bíblicos o de cualquier campaña evangelística depende del Espíritu Santo.

A medida que los pastores y los laicos se unan en un plan integrado y coordinado de ganancia de almas para Cristo, orando para recibir el poderoso derramamiento del Espíritu Santo, Dios dará resultados fuera de lo común. El Espíritu Santo será derramado y se ganarán almas,

MANERAS PRÁCTICAS DE EMPEZAR UN MINISTERIO DE ORACIÓN EN SU IGLESIA

• Elija un líder y a un co-líder para el ministerio de oración.
• El líder y el co-líder cada uno seleccionará, valiéndose de la oración, a otras dos personas para que se unan a ellos.
• Seleccione a personas que sientan una carga por la intercesión.
• Selecciones a personas que harán un compromiso de reunirse una vez a la semana para orar.
• Pídale a esas cuatro personas que cada una invite a otra persona para que se una al grupo en el mismo compromiso. (Ahora hay diez personas que componen un grupo de oración).
• Ore por nombres específicos.
• Use la Guía de Oración Intercesora.
• Ponga los nombres de tres a cinco personas por las cuales desea orar en una lista dentro de la Guía de Oración Intercesora.
• Ore por estas personas diariamente.
• Únase al programa de ayuda comunitaria
• Reúnase una vez a la semana por doce semanas.
• Estudie el libro Soldados de Oración o algún otro material acerca del poder de la oración.
• ¡Ore! ¡Ore! ¡Ore! (Puede usar losa principios de la "Oración Conversacional que se encuentra en el Apéndice C).

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